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Cuenta atrás, segundo que
destilan afrodisíaco
enervando el espíritu
para influenciarlos a que caigan
en ese laberinto de deseo y fuego,
donde sin quemarnos ardemos con infinidad de anhelos,
que tejemos en pieles cálidas que redactan una dulce
alianza.
Verbo de tiempo,
acción que a destiempo sigue pautas sinfónicas
de susurros galantes
que se enredan en las metáforas de nuestros cuerpos
liberados de ropas
que se vuelven testigos mudos de posiciones saciadas.
Análisis del núcleo…
Sujeto que no puede separarse del predicado
y anexan fronteras que húmedas
alientan guerras de independencia…
¡ Independentistas canallas!
Le roban a la galaxia la química que induce
a explotar con ganas,
la física que excitada levanta,
hurtan sin pensarlo entrando hasta tocar las paredes
más profunda de esa caja fuerte.
¡ Reputación!
Te induce… te lleva a bordar como sastre
entre sábanas descompuestas
que miran las seis letras de esa palabra que olvida que es
ser una dama
haciéndote liberar tus alas.
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