Te prohibiré
montar a caballo y mortificar a las luciérnagas
te prohibiré despedazar chapulines y hacerle autopsia
a las ratas
te prohibiré mirarme
ni como a tu padre
ni como a un desconocido.
Te prohíbo que hagas juicios sobre tantas cosas que no
conoces
te prohíbo la niñez
la juventud
y la mirada altanera.
Te prohibiré que te burles de los ancianos
que hagas enojar por gusto a los abuelos
que encuentres solución a mis problemas.
Pero también…
te prohibiré que no desafíes al mundo y a los
gobiernos humanos
que agaches la cabeza
que pierdas la esperanza.
Te prohibiré que no resistas
que no seas insurrecto a todas horas
te prohibiré que seas manso
que seas bueno,
te prohibiré que te hagas menos
que te quedes callado.
Te prohibiré que no ames con locura
que no sientas latir la tierra bajo tus pies.
Te prohibiré que hagas con tu vida
lo mismo que hice con la mía. |
