Cuando llegue ese día,
te cubriré de besos,
te escupiré despacio
y mancharé tu cuerpo
con mi amor ya imposible.
Te arrastraré en el lodo
de mi sexo caliente.
Te arrancaré los ojos,
me beberé tu semen
y sembraré jazmines
callados en el alba.
Así,
tal vez comprendas
que te amé hasta perderte… |