Mi madre tenía el silencio habitando en sus ojos
y los pensamientos revoloteando eternamente
en los momentos existenciales de sus días
Ella, ella era la portadora de luz y de palabras
iluminaba nuestra vida con su presencia
y nos contaba cuentos y relatos todas las noches.
En las noches de invierno alrededor del bracero
y en las noches de verano en el patio de la casa
teniendo como telón de fondo
las estrellas como luciérnagas estelares
iluminando el firmamento
Mi madre es la hacedora de todo
el mundo de mi infancia y la
de mi hermano y hermanas.
Ella todo lo abarca y las palabras
no alcanzan para nombrar
todas las cosas en las que sigue habitando
Mi madre tenía alma de paloma
y un corazón valiente que llegaba hasta el cielo
Los días seguían sus pasos
y las noches se dormían en sus ojos
Mi madre noche a noche
fue sembrando en mí las palabras
que me habitan y me manifiestan
Yo sólo soy la sombra
de todo ese Universo que era Ella.