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Un corazón grande que solo
conjugue el verbo amar.
Que sepa dar más que recibir.
Que se entregue con el alma al que menos tiene.
Que su palabra de consuelo y aliento.
Que dicha con ternura y mesura llegue a tiempo.
Que atenúe el grito del que exacerbado vocifera
y desalienta la PAZ…Ese que solo convoca a las guerras.
La suavidad de una mano fuerte
que puede acariciar a aquel que recibió
la bofetada inclemente de quien solo sabe golpear
para sentirse fuerte.
De la mano que cura las heridas del que recibió la bala
inmerecida en inútiles guerras.
Del que da para que otro tenga .Pan para saciar su hambre.
Manos que se ofrecen en señal de unión, amistad,
confraternidad.
Manos para derrumbar murallas.
Barrer los escombros de dolor y sembrar lirios y rosas,
Jazmines y amapolas .Para la alegría no para el asombro.
Corazones, manos y voces para desearnos la paz y para construirla
En la casa, la escuela, en nuestro pueblo y en todos los pueblos.
Que sea siempre el deseo de Paz que con furor se sienta y palpite
De uno a otro continente hoy y siempre y desde lo más
profundo …
¡PAZ para todo el mundo!
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