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Amor, no puedo
más;
sé que no es bueno este sentir,
quiero abrazarte por un minuto,
sentir el delicado roce de tu cuerpo.
Sabes que son tristes las despedidas,
pero al final del tiempo yo te amé;
no puedo evitar este sentimiento
si te llevo en lo profundo de mí.
Necesito abrazarte una vez más;
quédate dormido en mi pecho,
en nuestro lecho de dulzor.
Si mi corazón late desenfrenadamente.
Enciendes una dulce llama
en mi alma y corazón,
sensación que acaricias dentro
suave como terciopelo y fuego la alborada.
Abrázame, déjame vivir el momento
que el tiempo muy lento transcurre
para saborear de tu cuerpo la pasión.
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